Acompañados por el profesor Marcelo Rojas en el marco de la asignatura “Comportamiento y principios físicos de los materiales”, viajaron desde el campus Puerto Montt para la visita sabatina.

Para la mayoría de los estudiantes esta fue la primera vez que entraban a visitar una obra en desarrollo.

La construcción de la ampliación del pabellón Lago Llanquihue (campus Osorno) se encuentra en la fase final de la obra gruesa lo que ofrece la posibilidad de verificar detalles constructivos que en poco tiempo más quedarán ocultos por las obras de terminación.

Guiados por su profesor Marcelo Rojas y el director del departamento de Arquitectura y arquitecto a cargo de la obra, Mg. Hugo Fuentes, 17 estudiantes estrenaron sus cascos blancos entre andamios, movimiento de materiales y hombres trabajando.

Es un ejercicio de primer año de la carrera de arquitectura de la Universidad de Los Lagos, campus Puerto Montt. El curso viajó el sábado a visitar la obra de ampliación del pabellón lago Llanquihue.

“Ellos están en la unidad de hormigón y metal, y la idea es que vean una obra que se construye en estos materiales y cómo se acopla a una estructura anterior. También que estén presentes en el proceso constructivo. Este curso de primer año ha visitado diferentes instalaciones asociadas a los materiales de construcción: fábricas, barracas y proyectos de arquitectura. Esta es su primera visita a una obra propiamente tal. Es pasar del computador o del papel a lo tangible. Hemos comprobado que los chicos van a aprender más en el lugar donde se desarrolla la obra que sentados frente al pizarrón”.

El profesor Fuentes guió a los estudiantes, comentando el proceso de análisis inicial, las decisiones creativas, como alinear la fachada de la nueva estructura con la fachada de los edificios de Aulas Virtuales para ir dando un sentido unitario a las estructuras del campus o generar un espacio central protegido con el fin de propiciar la convivencia y la interacción para enriquecer el proceso formativo.

En cada sala y recinto del futuro espacio universitario, se detuvieron para desmenuzar las funciones de vigas y pilares, la relación entre los distintos materiales, presenciar los desafíos constructivos que plantea el diseño y las decisiones que se han tomado para resolverlos.

Los estudiantes hicieron bocetos, plantearon inquietudes y registraron con sus cámaras los detalles que les llamaron la atención durante esta clase práctica a la que asistieron puntualmente y muy motivados a pesar de la distancia y de haber sido convocados fuera de su horario habitual. “¡Hay que aprovechar estas oportunidades!” deslizó entre risas uno de ellos mientras devolvían los cascos al jefe de obra.