Como una forma de contribuir a que la Universidad de Los Lagos tenga un sello marcado por la sustentabilidad de la región y articular todas las iniciativas de sustentabilidad que se están desarrollando en la universidad en sus sedes y campus, se plantea el Programa ULagos Sustentable.

En la actividad de presentación de esta iniciativa, se contó con la presencia del periodista y analista internacional Raúl Sohr, quien dictó la charla “Visión de la problemática ambiental global/nacional y su vinculación con el rol de la universidad”. El también sociólogo, se mostró feliz de estar en Osorno para abordar un tema de importancia, no sólo para la Universidad de Los Lagos, sino para Chile y el mundo.

“Me parece vital que instituciones académicas como la Universidad de Los Lagos, tomen con la mayor seriedad el tema de la sustentabilidad, porque pueden conseguir muy buenos resultados al interior de la universidad y, lo principal, es la producción que hace la universidad hacia el conjunto de la comunidad. Todas las regiones de Chile necesitan abordar la sustentabilidad, como un asunto de vida o muerte y no exagero”, enfatizó Raúl Sohr.

El analista internacional, comentó que en la actualidad el cambio climático es “sin duda alguna, la mayor amenaza que enfrenta la humanidad y esto hay que combatirlo desde todas las trincheras y las universidades son un pilar muy importante en la lucha contra el cambio climático y a favor de la sustentabilidad”, sostuvo.

El Director de ULagos Sustentable, Gonzalo Mardones, explicó que se buscará la articulación de actores regionales para promover una cultura ambientalmente responsable con el desarrollo y la calidad de vida de nuestra región “la universidad se hace cargo de muchas de las temáticas ambientales en hacer un aporte a la sustentabilidad de la región”.

El académico, comentó que este programa tiene cuatro líneas de trabajo las que se distribuyen en: docencia de pregrado, con un sello de formación ambiental en la malla curricular; la investigación como aporte a la sustentabilidad en la región; una vinculación más intensa con la comunidad que incluya experiencias para realizar retroalimentación y aprendizaje; y el mejoramiento de los estándares de gestión ambiental, “lo que forma parte de un proceso y un cambio cultural, que será lento, pero que ya se inició”, indicó. M.M.M